José Estrada.
Palenque, Chiapas.
Productores de palma de aceite de la región Norte-Selva están
siendo afectados por los bajos precios que se han registrado durante las últimas
temporadas de cosecha.
En algunas zonas los precios han caído hasta los 80 centavos,
y se prevé que alcancen los 50 centavos, lo que significa que “tras diez años
de haberse establecido las empresas extractoras; los millones de pesos que les han
invertido las administraciones, tanto federales, estatales y municipales, a lo
que una vez se vislumbró como las vetas de “Oro Verde” para que los campesinos superaran
los altos índices de pobreza y marginación en las comunidades, ahora es considerada
una pesadilla para miles de productores que están a punto de irse a la quiebra.
Mediante un escrito dirigido al gobernador del estado,
Manuel Velasco Coello, productores de los municipios de Benemérito de las Américas,
La Libertad, Catazajá, Salto de Agua y Palenque, solicitan su intervención a
fin de poner un alto a la explotación de la cual son objeto por parte de las
empresas Palma Tica y Agroipsa, ya que a través de los años han logrado ser auto suficientes
en la producción de la materia prima y ahora son ellos quienes ponen precio a sus cosechas.
Alrededor de las 10:30 de la mañana del pasado viernes, un aproximado
de 60 productores provenientes de los municipios antes mencionados, arribaron a
las oficinas de la subsecretaria de gobierno donde se reunieron con el titular
de dicha dependencia, Carlos Morelos Rodríguez, a quien entregaron un escrito
donde especifican como las empresas extractoras han ido apoderándose grandes
extensiones de tierra a fin de extender sus plantaciones.
Pedro Barceló Gutiérrez, uno de los productores afectados, señaló
que en la actualidad están pasando una enorme crisis con la producción, ya que
las empresas encargadas de procesar la palma cuentan con plantaciones propias, por
lo que los productores libres han quedado en segundo término.
“Las plantas ya están siendo auto suficientes y nos están marginando
poco a poco. Tenemos que hacer colas por más de doce horas para poder entregar
el producto y nos ponen muchas condiciones”.
“Tenemos una tasa de extracción del 12.5 por ciento en
comparación con el resto del país que varía del 16 al 19 por ciento, por lo que
el precio sigue bajando y nos enfrentamos a una crisis económica muy fuerte”.
Manifestó que las empresas encargadas del procesamiento han decido
bajar el precio del producto y para presionar a los productores del Valle del Tulijá,
por lo que en los centros de acopio del Valle del Tulijá no están recibiendo la
fruta, y en caso de hacerlo les están pagando a 80 centavos el kilo, con la
posibilidad de que siga bajando”.
“El precio de la tonelada puesta en la planta bajó a mil 100
pesos. La producción que se realiza en el municipio de Marqués de Comillas se
está enviando para la costa porque no hay donde almacenarla, la fruta se está
pudriendo”. Puntualizó el palmicultor.
El anuncio que realizó el gobernador del estado durante su visita
al municipio de Acapetagua, el pasado 10 de Septiembre, de que entregará más de
300 mil plantas de palma africana durante el presente año para que Chiapas continúe
siendo líder nacional en la producción de éste cultivo, no será bien recibido
por los productores de ésta región, ya que eso representa un aumento de 2 343 hectáreas
de cultivo y en el estado, mucho menos en ésta región, aún no existe la infraestructura
necesaria para el procesamiento de la producción.
Pedro Barceló puntualizó que las ganancias obtenidas por el procesamiento
de la palma se van a otro lado. Agroipsa, a pesar de ser una empresa nacional, tiene
su sede en el estado de Jalisco; mientras que Palma Tica es originaria de Costa
Rica, por lo que se están enriqueciendo con el esfuerzo de los chiapanecos.
“La economía de los productores, alrededor de 5 mil, que se
ubican en los cinco municipios de la región norte-selva está colapsando y
muchos obreros se están quedando sin el sustento familiar, al igual que los
demás sectores implicados en la cadena de producción. Se prevé que para el próximo
año no va haber espacios suficientes para procesar la fruta”.
“En el escrito estamos
solicitando nuestra propia planta de extracción, para el beneficio de nosotros los
productores y nuestras familias. Una empresa local que genere empleos para los campesinos
chiapanecos”.
Señalaron tener “una inversión muerta” porque durante tres o
cuatro años, en tanto empezaban a producir las plantaciones, se invirtieron
recursos en fertilizantes, preparación y manejo de la tierra, así como en el mantenimiento
de las plantaciones.
Y mientras los palmicultores libres buscan soluciones para
escapar de la quiebra, las empresas extractoras “han ido apoderándose de gran parte
de las tierras que se ubican en ésta región, ya sea rentándolas o comprándolas,
para aumentar año con año su producción, ser auto suficientes y poder especular
con el precio que se paga a los pequeños productores”, reza el documento
dirigido al gobernador del estado.