José Estrada.
Palenque, Chiapas.
Alrededor de cien feligreses de la iglesia de Santo Domingo
de Guzmán se manifestaron en los bajos de palacio municipal, en solidaridad al párroco
Alberto Rafael Gómez Sánchez, quien se opone a construcción de un proyecto
peatonal en la avenida Hidalgo.
A pesar de que en diversas ocasiones los inconformes
señalaron que el movimiento era ajeno a los intereses de su líder espiritual,
el escrito que fue leído: dirigido a las autoridades, opinión pública y medios
de comunicación; señalaba los mismos puntos que el párroco utilizó en su carta
enviada al gobernador del estado, Manuel Velasco Coello, para desestimar la
obra.
Gritando consignas como: “Queremos Solución, No Imposición”;
“Se ve, se siente; El pueblo está presente”; “Hoy y mañana, la lucha seguirá” y
enarbolando panfletos, además de una manta donde se leía la frase: “No la
andador. Sí a la calle con circulación”; los inconformes exigían al presidente
municipal, Carlos Morelos Rodríguez, que bajara a dialogar con ellos.
Las puertas del palacio se encontraban cerradas, custodiadas
por un par de agentes desarmados; para evitar que el contingente pudiera ingresar
a las instalaciones.
El documento, que no fue entregado a las autoridades, donde
señalaban que la obra dejaría incomunicada a la iglesia debido a que no se
tenían contemplados accesos vehiculares, estaba firmado por el párroco de la
iglesia y culminaba con la frase “Atentamente: Comunidad Parroquial Santo
Domingo de Guzmán. Posteriormente entonaron cánticos religiosos.
Al no ser recibidos por el alcalde, quien se encontraba
fuera de sus oficinas, solicitaron el apoyo de los regidores y una comitiva,
conformada mayormente por mujeres, se reunieron en la sala de cabildos con los regidores
Evaristo Méndez Montejo, Enrique Méndez Vázquez, Roberto González y otros; quienes
les explicaron que la obra estaba siendo construida para beneficio, no soso de
la población; sino también de los feligreses, ya que estaba considerado un paso
vehicular exclusivo para las actividades parroquiales que así lo ameriten.
Y que las inconformidades seguramente se debían a un total
desconocimiento del proyecto, el cual contemplaba; les repitió nuevamente, un
acceso exclusivo para la iglesia del cual solo el párroco tendría las llaves.
Este comentario incomodó a las catequistas, quienes
señalaban que el convertir la avenida en un espacio peatonal acarrearía, además
de molestias a los feligreses que acuden a las actividades de la iglesia;
inseguridad debido al proliferación delitos como: el robo de automóviles;
asaltos; acosos a los niños que reciben doctrinas y otros atentados contra la
población, ya que sería un lugar muy solitario porque no transitarían
automóviles.
Por otro lado exigieron respeto a sus creencias; que el
nombre del párroco no fuera involucrado en el movimiento, que señalaron de ser
puramente social, ya que los medios de comunicación han tratado al sacerdote “como
trapeador y se han hechos fuertes críticas a la iglesia”; por que la obra,
misma que señalaron los regidores se ha politizado, no fue de su agrado.
Tras varios minutos de exponer cada una de las partes sus
puntos de vista sobre la obra; que al final será decidida por el gobierno del
estado, no lograron alcanzar acuerdos, debido a que la decisión ya no se encuentra
en manos del alcalde; a quien los manifestantes
solicitaron una reunión personal, a través del secretario Municipal, para
exponer sus quejas como parte de la sociedad palencana.